Alexander Cabezas, Coordinador Regional Viva Juntos por la Niñez; Rigoberto Astorga, Representante del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF);
Iris Arias, Presidenta Ejecutiva del Patronato Nacional de la Infancia (PANI) y Jesús Rosales, Director Ejecutivo del Centro Iberoamericano de Estudios para la Familia (CIBEFAM)
coincidieron en la disciplina con amor y educación en positivo como instrumentos para padres y madres en la crianza de sus hijos e hijas.
La familia, según la Declaración Universal de los Derechos Humanos, es el elemento natural, universal y fundamental de la sociedad, y tiene derecho a la protección de la sociedad y del Estado. Las formas de vida familiar son muy diversas, dependiendo de factores sociales, culturales, económicos y afectivos: nuclear, mono parental, extensa… y es en la familia donde se desarrollan los niños, las niñas y los adolescentes.
Pese a la normativa como la Declaración de los Derechos del Niño, la Convención sobre los Derechos del Niño (1989) y el Código de Niñez y Adolescencia (1998) que reconocen al niño, niña y adolescente como sujeto de derechos y establece los mecanismos administrativos, legales y judiciales para la aplicación de estos derechos, las personas menores de edad siguen siendo víctimas de violaciones en sus propias familias.
En el PANI, en el 2012, se atendieron cerca de 30 mil situaciones violatorias de derechos de los niños, niñas y adolescentes: conflictos familiares, la negligencia, el maltrato o abuso en cualquiera de sus formas, el castigo físico, el trabajo infantil, la explotación sexual comercial, la trata entre otras. Un 90% de ellas ocurrieron dentro de su entorno familiar.
Ante esta situación, el PANI actúa en la Promoción, prevención, atención integral, protección especial, garantía y defensa de derechos con la prioridad de que los niños estén con sus familias o en hogares. Por ejemplo:
- En la Academia de Crianza se capacitaron 450 padres y madres y 75 personas menores de edad.
- Se hicieron 60 Diagnósticos Cantonales.
- Se brindó atención telefónica a 37.281 personas en el Centro de Orientación e Información (COI).
- Se brindó atención psicosociolegal a 6.837niños, niñas y adolescentes.
- Se dio atención inmediata a 5.468.
- Se atendieron 20579 consultas.
Cuando, como última medida hay que asumir la protección de una persona menor de edad, el PANI coordina con Hogares Solidarios Subvencionados que protegen a 1.928 personas menores de edad, Hogares Solidarios no Subvencionados 2778, en Organizaciones no Gubernamentales Residenciales 2.389 y en albergues cerca de 400.
El PANI también apoya a las familias para que sus hijos e hijas reciban atención integral a través del subsidio a organizaciones como Centros de Atención Integral donde hay 2.606 niños y niñas, en Centros de Alimentación 978, en Red de Cuido 618 personas menores de edad.
Para la Presidenta Ejecutiva del Patronato Nacional de la Infancia. Dra. Iris Arias Angulo “Los esfuerzos por la garantía de derechos de las personas menores de edad son constantes, y la prioridad es mantener a la persona menor de edad con su familia. Además, cuando se detectan situaciones de inadecuado manejo, utilización del castigo físico como medida de corrección y dificultades de limites siempre se prioriza facilitar a la familia la construcción de nuevas formas de relación basadas en respeto y amor”.
Agregó que para continuar trabajando con la familia como el principal entorno protector de los niños, niñas y adolescentes, es necesario un PANI fortalecido y con presencia en todos los cantones del país para que en conjunto con otras instituciones de Estado y la Sociedad Civil logremos hacer realidad el sueño de un mundo mejor y de oportunidades para los niños, las niñas y los adolescentes, esto a través de los Sistemas Locales de Protección. Pero es aún más necesario que tomemos conciencia de que la familia es el principal entorno protector para que un niño, niña y adolescente se desarrolle de manera integral y disfrute plenamente de derechos. Asimismo, que las personas menores de edad hagan efectivo su derecho de participación en todas las decisiones que les afecten.