El Patronato Nacional de la Infancia (PANI) pretende recoger a todos los niños, niñas y
adolescentes indigentes.
Su nuevo presidente ejecutivo, Mario Víquez, aseguró que llevará a estos menores "adonde
tenga que llevarlos" con tal de garantizarles la protección de sus derechos.
Solo en la capital, Víquez dice que hay 200 menores indigentes, mientras en cada cabecera de
provincia podrían haber 30 en esa condición.
Califican como indigentes los menores que fueron abandonados o dejaron sus casas y
enfrentan, entre otros problemas, el de la drogadicción.
Cuándo y cómo realizará esa tarea es algo que Víquez todavía no precisa, pero asegura que
buscará ayuda de instituciones como el Ministerio de Salud y de Hacienda para aumentar la
capacidad del PANI para atender a esta población.
Actualmente, el Patronato cuenta con 45 albergues en todo el país. Con excepción de dos (el
de La Garita de Alajuela y el de barrio San José), los demás solo tienen capacidad de
atender a diez niños, aunque han habido ocasiones en que la necesidad supera con creces ese
límite.
Hasta hace dos semanas, 611 niños y adolescentes recibían atención en esos albergues.
Segunda vuelta. Víquez regresa al PANI por segunda vez como presidente ejecutivo, después de
una breve gestión entre 1996 y 1998.
Encuentra una institución con un plan estratégico elaborado pero sin echar a andar aún. Esto
como parte del proceso de reforma recomendado hace cinco años por una junta de notables.
Víquez pretende ejecutar esa reforma concentrándose en temas como la violencia contra los
menores, y simplificando el quehacer institucional para dedicarse a lo que él considera
básico.
Víquez considera fundamental la prevención de la violencia. Allí se dirigirán acciones de
protección (mediante albergues), y de atención terapéutica (de agresión física o
psicológica).
También dijo que buscará reforzar las acciones de defensa y la garantía de los derechos de
los menores mediante el ejercicio efectivo de la representación legal de niños, niñas y
adolescentes desprotegidos.
En su administración buscará simplificar el acceso de las familias a los servicios de
prevención a través de la reapertura de los consultorios familiares.
Prometió pelear por más recursos, porque "cuando le dejan de dar plata al PANI es como si
dejaran sin plata a un hogar muy grande".