El Hogar San Gabriel es parte de la Asociación para la Promoción y el Desarrollo de la Educación del Instituto Otto Silesky que fue fundado en 1983 y se caracteriza por ser una institución académica semiprivada cuya oferta académica regular se complementa ofreciendo a los estudiantes una diversidad de opciones formativas, que incluyen educación abierta, un internado y dos carreras técnicas a nivel técnico medio.
El Hogar San Agustín propone una programación de atención individual que evita los problemas y da una dimensión adecuada al residente, considerando el aprendizaje según el ritmo del individuo y promoviendo su inclusión e integración social tomando en cuenta aspectos emocionales, sociales y cognitivos.
Para el inicio de esta alternativa de protección, el Patronato Nacional de la Infancia hizo una inversión de 15 millones de colones para el equipamiento de las instalaciones y hará una transferencia mensual de 1.193.000 mensuales por cada adolescente protegido. Los 15 adolescentes del Hogar San Gabriel tendrán el acompañamiento de tres psicólogos las 24 horas, todos los días del año y acceso a todos los servicios del Instituto.
Para la Presidenta Ejecutiva del Patronato Nacional de la Infancia, Dra. Iris Arias Angulo “En Costa Rica la participación de la sociedad organizada en la atención integral de la niñez y la adolescencia es una realidad de la que nos sentimos orgullosos por los logros alcanzados. Tan fructífera ha sido este trabajo, que hoy las organizaciones no gubernamentales son aliadas indispensables y estratégicas en la protección que el Patronato Nacional de la Infancia brinda a miles de niños, niñas y adolescentes”.
En este momento, PANI coordina con 107 organizaciones que se caracterizan por su entrega, dedicación y compromiso al realizar su labor. Sin embargo, algunas destacan porque su misión y visión es creer que sus residentes son líderes potenciales y trabajan para desarrollar sus talentos, su empoderamiento y su capacidad de resiliencia.
Añadió que “En mi gestión se apostó a la atención diferenciada y especializada por lo que no hemos escatimado esfuerzos para lograr la apertura de nuevas alternativas que deben procurar lo mejores estándares de calidad en salud, alimentación, educación, autonomía y sobre todo potenciar las capacidades de las personas menores de edad ingresadas, para promover su desarrollo y sus talentos”
El Señor Otto Silesky comentó que el IEI nació como un esfuerzo para atender la diversidad de los estudiantes de manera individualizada. Manifestó “Usted no puede segregar a las personas por ser más o menos inteligentes cuando la idea de la inteligencia ha variado. Lo que hay son diferentes formas de aprender y cada una es absolutamente respetable».
Comentó que el IEI fue pionero en las adecuaciones curriculares en el país y en usar la tecnología para el desarrollo integral de las personas menores de edad. Ellos fueron de las primeras organizaciones en tener red inalámbrica integrada en todo el recinto, usar una antena parabólica propia de su institución educativa; y los primeros en usar computadoras portátiles en el aula.
El señor Silesky recordó la obligación de las personas adultas y del Estado en atender a las personas menores de 18 años desde el enfoque de sus derechos, reconoció el esfuerzo del PANI en iniciar este proyecto con todos los recursos disponibles y motivó a los adolescentes a creer en ellos mismos y alcanzar las metas que se propongan.